La estación de Santa Cristina estaba situada en el kilómetro 31,825 de la línea y ocupaba un terreno irregular de 2.066 metros cuadrados. Tenía tres vías ya que el andén se prolongaba en sentido a Sant Feliu de Guíxols como vía muerta.

Santa Cristina es la única estación de tren que está en el lado contrario al habitual en la línea, por lo tanto también está cambiada la disposición de las vías. La gran diferencia que tiene con otras estaciones es que la vía de servicio está muy junta a la principal, por tal motivo cuando se cruzaban dos trenes apenas había espacio intermedio para los viajeros.

Plano perteneciente al fondo del Arxiu Municipal de Sant Feliu de Guíxols

Foto perteneciente al fondo de ASAFEGI

Foto perteneciente a Allan M. Barnes

Foto perteneciente a Jordi Budó

Foto perteneciente a Jordi Rabell

Foto perteneciente al fons d' ASAFEGI

La estación era de tercera categoría, con una superficie edificada de 71 metros cuadrados, y estaba construida de mampostería y mahones con tejado a dos aguas con cubierta de teja plana. Interiormente la estación estaba constituida por una sala de espera, taquilla, despacho del jefe de estación y su vivienda, compuesta por comedor-cocina y tres habitaciones. Al lado se encuentra el típico edificio de los retretes que ocupaba 17 metros cuadrados característico por tener un tejado a 4 aguas. Completaba las instalaciones un pozo circular de 7 metros de hondo con lavadero anexo.

Esta estación tuvo muchos Jefes de estación (6), y el principal problema que tuvieron era el paso a nivel anexo que se guardaba con dos barreras provistas de ruedas, bastante poco habituales en los ferrocarriles, barreras que habitualmente son batientes.

Como se puede ver en estas fotografías el turismo no había llegado todavía a la Costa Brava, y entonces Santa Cristina vivía del campo. La vía hacía de separación entre la población y los campos limítrofes.

La evolución del tránsito de viajeros por la estación, modesta, fue subiendo en número desde los poco más de 30 mil del periodo 1893 al 1900, hasta los 199 mil del periodo 41-50. Luego el auge de la carretera y el turismo hicieron el resto, y el picado en número de viajeros fue evidente. La gente ya no se podía esperar en el borde del andén de la estación para esperar al tren.

La carretera de Palamós no tenía demasiado tráfico, como muestran las fotos del paso a nivel, que estaba a un lado de la estación y al final de una larga curva que procedía del apeadero de la Font Picant. Como era uno de los puntos problemáticos de la línea, se reforzó el paso con unas barreras más macizas y la presencia de la guardesa para dar paso al tren daba  toda la confianza.

En casi todas las fotos de pasos a nivel sale realizando su tarea habitual la guardesa Enriqueta Bou, como en las dos fotos de debajo, realizadas por Jordi Budó. En realidad había muchos pasos a nivel en la línea, pero sólo 6 estuvieron totalmente vigilados por un guarda. Dependiendo de la peligrosidad del paso a nivel se guardaba con una cadena o una barrera. El de Santa Cristina era el que más llamaba la atención.

las tres fotos de Jordi Budó

Estación de Santa Cristina en la actualidad

La estación de Santa Cristina presenta buen aspecto general, muy cuidada y rodeada de verde, es una parada de la vía verde del carrilet II para repostaje de bebida.

Como se puede ver en las fotos la estación de Santa Cristina no sólo está totalmente bien conservada, sino que incluso el Ayuntamiento la ha acondicionado para servir de puesto de información.

Como se puede ver en dos de las fotos de debajo, se ha acondicionado la traza del carrilet para hacer cicloturismo, algo que el Ayuntamiento de Santa Cristina promociona en su web municipal.

A pesar de que se vea pequeñito, el cartel verde que explica la ruta del carrilet se ha dejado a una buena resolución para poderlo leer. Clicando sobre la foto se abre una ventana con la imagen en grande (hay que utilizar las barras de desplazamiento).